Os voy a enseñar un bonito puf con cierto aire años 70.
No, no se trata de un puf de IKEA, ¿o sí?. Bueno, mitad sí, mitad no…
El caso es que es el resultado de un trabajo en el que se han utilizado materiales de IKEA que, por cierto, nada tienen que ver con un puf.
Este es el esqueleto del puf:
Si empezamos por arriba los materiales utilizados son:
- Dos cojines viejos
- La base del asiento está compuesta por un tablero que en sus mejores tiempos fue parte de un cabecero de IKEA.
- Debajo del cabecero se ha colocado parte de un palé.
- Por último, como soporte del puf, cuatro patas que pertenecían a una cama de IKEA.
Teniendo en cuenta lo impecable de su resultado, ¿quién hubiera dicho que está realizado con materiales que bien podían haber acabado en un contenedor?.