En el dormitorio todo influye para crear un ambiente propicio para la relajación y el descanso, desde la iluminación, el color de las paredes, el colchón… Dormir bien es esencial para descansar y tener una buena salud. A continuación te mostramos algunas ideas para conseguir que tu habitación se convierta en un oasis de tranquilidad.
Trucos para dormir mejor en tu dormitorio
- Rodearte de un ambiente ordenado y limpio te ayudará a que te relajes y descanses mejor. Es fundamental limpiar debajo de la cama para asegurar que haya una buena ventilación y por lo tanto el colchón esté ventilado.
- La televisión está totalmente prohibida. Se ha demostrado que la luz que emite la pantalla hace que te sea más difícil quedarte dormido. Tampoco son recomendables las tabletas y teléfonos.
- Es recomendable colocar el cabecero de la cama en un muro interior en vez de exterior, donde notarás más el frío y el calor. La ubicación ideal es colocarla en una paredes donde pueda ver la puerta y las ventanas.
- Muy importante airear bien el dormitorio por la mañana.
- La temperatura ideal para dormir y descansar adecuadamente es aproximadamente 21 grados en verano y 19 en los meses de invierno
- Coloca persianas o cortinas tupidas para impedir el paso de la luz. La oscuridad favorece el sueño.
- Un buen colchón. S el tuyo tiene más de 10 años es hora de cambiarlo por uno nuevo. Será una de las mejores inversiones que hagas para tener un sueño reparador.
- La almohada. Es importante que el cuello esté alineado con la columna, por eso el grueso y firmeza de la almohada debe ser el adecuado.
Colores que te ayudarán a descansar
Los colores de las paredes influyen en tu ánimo y en la calidad del sueño. Para elegir los tonos apropiados para tu dormitorio debes tener en cuenta la teoría de la psicología del color.
¿Qué ambiente quieres crear en tu habitación? Si quieres una atmósfera que te transmita paz y relajación debes, elegir tonalidades que te aporten esas sensaciones.
Descarta tonos estridentes o vibrantes y también que sean muy oscuros. Es mejor optar por colores claros para que den luminosidad al dormitorio.
Si te gustan las tonalidades fuertes puedes pintar en una sola una pared un tono más oscuro de la gama cromática elegida. También puede aportar color con los complementos: cojines, ropa de cama, cuadros…
Blanco. Aporta luminosidad y crear la sensación de amplitud visual. Conseguirás crear un ambiente donde prime la luz, frescura y limpieza. Puedes optar por un tono marfil, blanco perla o blanco roto.
¿Quieres conocer cómo decorar dormitorios blancos sin que queden sosos?
Gris. Es un color neutro que tiene una amplia gama cromática para escoger. Ten en cuenta las dimensiones de la habitación a la hora de escoger una tonalidad. Solo si es muy grande puedes decantarte por un tono oscuro.
Verde. El color de la buena suerte y de la naturaleza. En sus tonalidades más claras transmite equilibrio, armonía y tranquilidad.
Azul. Aporta serenidad, tranquilidad y calma al dormitorio. Los tonos claros y pastel son propicios para favorecer el sueño. Al ser un color frío puedes combinarlo con tonos cálidos como el amarillo, naranja…
Colores tierra. Son tonos atemporales que aportan elegancia al dormitorio. Puedes optar por los tonalidades beige, marrones claros…
La iluminación
Es un factor clave para conseguir un buen descanso en el dormitorio. Es recomendable contar con varios tipos de iluminación.
- Añade una luz ambiental que sea directa pero que no moleste. Colocas en la pared a una altura adecuada o en las mesitas de noche.
- General. Coloca una luz en el techo que ilumine toda la estancia.
- Puntual. Para iluminar determinados elementos que quieras destacar, en una estantería, un cuadro…
- Luz amarilla o naranja. Te prepara para el sueño y descansar mejor.
Muebles funcionales
- Elige piezas que sean funcionales y versátiles.
- Modelos cómodos y ligeros que puedas trasladar con facilidad.
- La madera maciza siempre es una buena solución a la hora de escoger un material para el mobiliario del dormitorio. Durarán muchos años en muy buen estado.
- El cabecero. La medida más recomendable es que no sobrepase los 130 cm. Forrado de tela, de madera, de cuero, tienes una gran variedad de modelos para personalizar tu dormitorio.
- ¿Te interesa conocer cabeceros ideales y funcionales para dormitorios pequeños?
Ropa de cama
- El tejido más recomendable para fundas y sábanas es el algodón, porque transpira y por la suavidad de su tacto.
- Otra opción es una fibra parecida a la seda que se llama Lyocell.
- El relleno nórdico de plumas es el mejor. La combinación perfecta es 90 % de plumón de oca y un 10 % de pluma de ganso y pato.
- Añadir cojines de diferentes tamaños aporta calidez y confort.
- Las alfombras crearán un ambiente más acogedor en el dormitorio.
¿Qué te han parecido estos consejos para convertir tu dormitorio en un espacio relajante y lleno de buenas vibraciones?