Este salón pequeño o de reducidas dimensiones, ha sido decorado de manera práctica y funcional, además de bonita y económica ¿cómo? En tiendas como Ikea puedes encontrar todo lo que tu casa necesita para ser confortable, práctica, funcional y bonita.
Este salón pequeño ha quedado perfecto para poder aprovechar algunos momentos en familia tranquilamente o en pareja. Los elementos básicos como el sofá o el mueble para el televisor, están bien integrados. Pero lo formidable de este conjunto es saber escoger los colores, de la forma más adecuada.

Como hay poco espacio, lo más correcto es utilizar colores claros. En este caso el blanco es perfecto ya que hace que la iluminación natural o artificial de la estancia, rebote e ilumine todo el espacio. Si tienes una o varias ventanas, no obstaculices la luz con cortinas de tejido demasiado opaco. Deja que la luz penetre en la estancia, así parecerá más grande.
Respecto al suelo y las paredes, deberían ir en color blanco. Pero para resaltar un poco el salón pequeño y que no se vea por igual, se puede combinar con otro color. En este caso se ha escogido un verde vibrante y espectacular. Un verde muy parecido a la de las típicas manzanas Reineta, el cual se integra perfectamente.
No importa si te gusta una tonalidad más oscura de un color, lo importante es donde lo pongas. Evidentemente, al contar con pocos metros cuadrados en esta ocasión, la mejor solución es pintar una sola pared. En este caso ha sido en la que se encuentra una puerta abierta, y precisamente esto hace que parezca aún mayor.
Por lo demás, los muebles como el sofá, la mesa tipo lack o la estructura para televisión van en un bonito e impoluto color blanco. Puedes romper un poco el color utilizando verde en algunos complementos, como en este caso son las plantas. Y para completar una alfombra no puede faltar. En Ikea encontrarás muchas a precios diferentes.
¿Qué te parece? ¿Cuál es tu color favorito?