Si quieres darle un toque muy especial a la distribución de tu hogar, las cocinas americanas son una de tus mejores opciones ya que ganarás en amplitud y disfrutarás de más ventajas. Por supuesto, también tienen sus inconvenientes.
Las cocinas americanas tienen muchísimo éxito en todo el mundo, gracias en parte a lo conocidas que se hicieron por hacer en todo tipo de series y películas. Se destacan principalmente porque están abiertas, esto es, no tienen una puerta o tabique que las separe del resto de la casa, por lo que se ven en el mismo espacio que la estancia que tienen al lado, normalmente el salón.
Este concepto se veía únicamente en las casas norteamericanas, aunque hace unos años eso cambió y comenzaron a triunfar en el resto del mundo. En España tienen mucho éxito, y pueden verse en muchas de las construcciones más novedosas. Además, también se pueden renovar las cocinas antiguas para convertirla en una de este estilo, sin duda será un acierto en cualquier caso.
Como casi todo en esta vida, las cocinas americanas tienen también ventajas y desventajas, por lo que antes de ponerlas en tu hogar debes analizar ambos lados de la balanza, ya que de no hacerlo podrías tomar una decisión errónea. Veamos lo más interesante para destacar en ambos casos.
Ventajas de las cocinas americanas
Más iluminación
Las cocinas americanas suelen caracterizarse por tener grandes ventanales, lo que permite que toda esa zona pueda disfrutar de mayor iluminación. Al no haber un tabique que la separe del salón, éste podrá disfrutar también de más luminosidad. Esto significará un ahorro en el consumo de la luz, que a largo plazo será muy importante. Además, que la luz natural sea de tanta calidad nos permitirá lograr un ambiente más agradable.
Ganar en amplitud
Al verse este espacio abierto, uniendo cocina y salón, se verá que es mucho más amplio, efecto potenciado además por la gran luminosidad que destaqué en el punto anterior. Una cocina grande, o que nos parezca más amplia, nos permitirá trabajar mejor en ella y no tener esa sensación de claustrofobia que tantas veces se siente en la cocina, especialmente cuando es pequeña y estás preparando varias cosas a la vez.
Formar parte del ocio
Las cocinas americanas permiten que puedas estar de charla con tu familia o viendo la tele al mismo tiempo que preparas una deliciosa comida. El espacio abierto te mantiene en comunicación con las personas que estén en el salón, y puedes disfrutar igualmente de la televisión, la radio o los elementos de ocio que tengas en ella sin tener que llevártelos a la propia cocina.
Vigilar a los niños
La última ventaja que merece la pena destacar es el hecho de que no tendrás que perder de vista a los niños mientras preparas la comida, ya que estaréis en el mismo espacio y los podrás vigilar en todo momento. Esto viene especialmente bien en sus primeros años de vida, cuando necesitan que haya siempre un par de ojos controlando lo que hacen para que no les pase nada.
Principales inconvenientes
Los olores
Debes tener en cuenta que el olor de todo lo que cocines no estará solo en la cocina, se pasará al salón ya que forman parte del mismo espacio. Igualmente llegará a todas las habitaciones que estén conectadas directamente con la cocina. Si no sueles cocinar mucho o ligero, no pasa nada, pero si frecuentemente preparas comidas con aromas muy fuertes, quizás no sea buena opción apostar por las cocinas americanas.
Ruidos molestos
Hay electrodomésticos y utensilios de la cocina que cuando los estás utilizando hacen ruidos muy molestos, como la batidora, la olla a presión, el microondas… Todo esto puede resultar un incordio para las personas que están en el salón viendo la tele, estudiando, leyendo, jugando o simplemente buscando un momento de relajación.
Muchas distracciones
Hay muchas personas que se meten de lleno en el mundo de la gastronomía para liberar estrés y poder disfrutar de su propio espacio en su tiempo libre, algo que sin duda permite el cocinar. Sin embargo, con las cocinas americanas, compartes ese espacio con las personas que están en el salón, por lo que hay distracciones que evitarán que puedas relajarte y centrarte en ti misma/o.
Ahora que sabes los pros y contras de las cocinas americanas ya puedes decidir si te compensa o no apostar por una de ellas para tu hogar. Yo reconozco que tengo debilidad por estas cocinas, y mi sueño es poder tener una de estas en mi casa. Quizás es por mi pasión por todo lo norteamericano, y unido a lo mucho que me gusta cocinar, la combinación sería perfecta. ¿Y a ti? ¿Te gustan este tipo de cocinas o prefieres las de toda la vida?