¿Quién dijo que las cocinas eran incompatibles con los tonos pastel? Esta cocina blanca y rosa os dejará sin aliento y seguro que encandila a más de una y a más de uno.
Es cierto que el color rosa no es el más habitual para decorar cocinas. No es cuestión de estética. Quizá por tradición, por falta de originalidad o quién sabe, pero la estética no está reñida con la cocina blanca y rosa que os vamos a presentar. De hecho, seguro que más de uno se plantea teñir la suya ya que aporta un toque muy dulce, acogedor y un poco vintage a la estancia. Analizamos toda la decoración para convencerte de que el blanco y el rosa puede ser la combinación ganadora para la nueva cocina del hogar.
Cocina blanca y rosa, ¿por qué no?
Antes de nada, queremos poneros los dientes largos y enseñaros con una imagen la cocina blanca y rosa de la que os hablamos.
¿No os parece una cocina de película? ¡Dan ganas de ponerse a cocinar pasteles sin parar! Pero, vamos a pararnos un momento a analizar lo que éste color transmite:
Psicología del color
Según la psicología del color, el color rosa hace honor a las características de la flor que representa. Se trata de un color dulce, amable, delicado, suave, romántico, joven… Por otro lado, el color blanco representa la pureza, la inocencia, la bondad y la limpieza. ¿Resultado de mezclar los dos colores? Una cocina inocente, limpia, despejada, dulce y acogedora.
Cómo decorar una cocina blanca y rosa
Cuando uno piensa en decorar una cocina, probablemente el rosa no sea el primer color que te venga a la mente. Sin embargo, si lo piensas un par de veces… ¿por qué no? Es cierto que las cocinas actuales se muestran casi sin color, camufladas en el ambiente, con materiales como la madera o el acero inoxidable. Pero, a veces no está mal ir a contracorriente y huir de las tendencias. Así crearás un espacio único y original que, a pesar de no cumplir con los mandamientos de las cocinas modernas, cumplirá los mandamientos de la originalidad y el gusto propio. Te damos algunos detalles para conseguir una cocina blanca y rosa como la de la fotografía.
Lo primero que debes tener en cuenta es qué cantidad de rosa vas a querer incluír en tu cocina. Si adoras este color y quieres teñirla por completo, te recomendamos dejes la pared y el suelo y te centres en los armarios y los cajones. Así, si dentro de un tiempo cambias de idea, será más fácil pintar o cambiar los muebles. La pared, el suelo y los complementos (la mesa, los picaportes, los adornos…) mantenlos al margen. La madera es perfecta para el suelo y el blanco para los complementos y las paredes.
Un consejo: cuanto más intenso sea el rosa, más pequeña parecerá la estancia. ¿Quieres que parezca una cocina espaciosa? opta por tonos pastel y por un rosa chicle más suave.
Una cocina más blanca que rosa
Si prefieres darle la vuelta a la moneda y dar protagonimo al color blanco, también puedes hacerlo. Solo necesitas incluir algunos detalles en rosa para darle color y dulzura a la estancia.
Os prometimos una cocina blanca y rosa de la que os enamoraríais pero queremos regalaros otra para aquellos que no quieren saturar con color las estancias. ¿La solución? añadir a tu cocina blanca algunos detalles en rosa chicle. Así no tendrás que pintar muebles y mancharte las manos. Escoge unos cojines nuevos para las sillas o unas lámparas al estilo industrial en tonos rosas. No es tan arriesgado y ¡puedes cambiar de color en cada estación del año!
¿Una idea? Haz tu propio mantel con telas de Ikea. Escoge el color que quieras, la medida que prefieras y el estampado (con rayas blancas, lunares, flores…) ¡Así sí que será una cocina única!
¿Qué opinas de la cocina blanca y rosa? ¿te ha enamorado o prefieres una cocina al estilo Shabby Chic? ¡Cuéntanos tu opinión en comentarios!