¿Quieres mantener tus sofás blancos como el primer día? Si hay una pieza esencial en el salón es el sofá. Es uno de los muebles que más actividad y uso reciben: horas sentados viendo la tele, las siestas, los juegos de los más pequeños… A continuación te contamos algunos trucos para mantenerlos perfectos y como nuevos.
Cuidados especiales
La elección del sofá es una de las decisiones más importantes que vamos a tomar a la hora de vestir el salón o zona de estar. Por eso, no te precipites y tomate tu tiempo.
Las tapicerías, igual que las alfombras y las cortinas, van acumulando polvo a consecuencia del uso continuado. Por eso es imprescindible una limpieza semanal para mantenerlos en perfecto estado.
Si te has decantado por el color blanco pero te crea una cierta inquietud su mantenimiento, no te preocupes, porque puedes conseguir que no pierda su color con unos cuidados adecuados.
Tanto si la tapicería es en tela o en piel, necesitará de un cuidado especial para mantener su color, libre de suciedad, malos olores y bacterias. Como base para una correcta limpieza de la tapicería del sofá, es utilizar la aspiradora para eliminar polvo y ácaros.
No es nada sencillo lavar los sofás blancos. Si puedes retirar las fundas, la tarea es menos complicada, pero tienes que saber que con cada lavado va perdiendo su color original. Si no fuera posible lavarlas, pasa la aspiradora y luego aplicas espuma seca, la dejas secar y la retiras con un cepillo.
También te puede interesar: Sofás de tela en Ikea ¿cuál prefieres?
Cómo evitar que los sofás blancos no pierdan color
Si tu sofá tiene fundas y te permite quitarlas te proponemos unos consejos para que puedas limpiarlas sin que el tejido se dañe, se vayan los olores y mantenga vivo el color.
- Lo primero que tienes que hacer es darle la vuelta a la funda para proteger la zona exterior.
- Llena la bañera casi a la mitad con agua fría y añade 300 gramos de sal. Sumerge las funda durante media hora.
- Puedes completar la limpieza con la lavadora. Escoge un programa corto con agua fría y pon en el cajetín del detergente, medio vaso vinagre blanco.
Lavado en seco
Un truco sencillo para higienizar los sofás blancos es lavarlo en seco con lavanda y tomillo. Necesitarás 1 vaso de bicarbonato, 1/2 de lavanda seca y 1/2 de tomillo seco.
- Vierte el bicarbonato y las hierbas por la noche cuando no le vayas a dar uso al sofá. Déjalos actuar toda la noche.
- A la mañana siguiente pasa el aspirador y verás que el resultado es sorprendente.
- El bicarbonato es perfecto para eliminar los malos olores y desinfectar.
- La lavanda y el tomillo dejarán un delicioso aroma.
Limpieza con un atomizador
Es un sistema de limpieza que siempre puedes tener a mano. Es una buena solución si percibes que alguna parte de los sofás blancos tiene una mancha o se ha impregnado de algún olor desagradable. Para la mezcla necesitarás: 3 tazas de agua, 1/2 vaso de vinagre blanco y un atomizador.
- Mezcla el agua con el vinagre según las cantidades descritas para que el sofá no acabe oliendo muy fuerte.
- Agita la botella bien antes de rociar. Humedece bien toda la superficie manchada.
- Sería recomendable realizarlo por la noche y dejar una ventana abierta.
- El vinagre es un desinfectante natural muy eficaz. Es un remedio casero para eliminar humedades, olor a tabaco y de las mascotas.
Trucos para limpiar piezas de piel
¿No sabes cómo cuidar adecuadamente tus sofás blancos de piel? Mira estos trucos caseros que conseguirán que recuperen el color y su brillo natural.
- Para sacar brillo al sofá claro o blanco, solo tienes que frotar con un paño impregnado en vaselina y pasarlo por toda la superficie. Déjalo secar 30 minutos y con otro trapo seco lo frotas hasta conseguir que vuelva brillar.
- Otro recurso casero para devolverles el color y el brillo es utilizar leche condensada. Humedece bien un paño y lo pasas con cuidado por todo el sofá. Después lo frotas y secas con otra gamuza hasta conseguir el resultado deseado.
- Si tienen manchas de aceite, chocolate, etc., aplica cuanto antes jabón líquido neutro.
- Un remedio sencillo para eliminar las manchas de bolígrafo, es limpiarlo primero con un paño húmedo y luego con alcohol.
- Un truco para evitar que los sofás blancos se cuarteen, es añadir una gotas de aceite en una gamuza y aplicar por toda la superficie hasta pulirlos. Seria recomendable realizarlo 2 veces durante el año. La crema corporal también funciona muy bien.
- No los limpies con toallitas desmaquillantes o para bebés ya que podrías dañarlos.
- Manchas de barro. Para limpiarlas lo mejor es dejarlas secar y luego las cepilla. Después pasas un trapo húmedo.
- Pelos. La mejor manera de eliminarlos es pasando la aspiradora por todos los rincones.
También te puede interesar: ¿Tienes poco espacio? Busca sofás cama
¿Qué te han parecido estos sencillos trucos para conseguir que tus sofás blancos sigan como nuevos?